Dos iniciativas de la UAO se encuentran nominadas al Premio Latinoamericano a la Innovación en Educación Superior, en la categoría ‘Experiencias de aprendizaje transformador’. Por un lado, Sandra Arce, docente de la facultad de Ingeniería, está nominada con el proyecto ‘Integración de los retos creativos colaborativos al semillero de solución creativa de problemas: una experiencia para propiciar el desarrollo de habilidades del siglo XXI en estudiantes de primer semestre’.

Igualmente, el Programa de Articulación con la Educación Media, PAEM, comparte categoría, destacando la labor de esta iniciativa, que busca que los estudiantes de colegios con los que se tenga convenio puedan iniciar, a través de ‘Rutas Formativas Especiales’, su proceso formativo universitario desde grados décimo y once.

El proyecto de la profesora Arce empezó a construirse en 2015 con los estudiantes de primer semestre a partir de la asignatura Introducción a la Ingeniería I, impartida a  nueve programas de Ingeniería , con el objetivo de lograr que el estudiante aprenda a “Identificar y  plantear de forma creativa soluciones a un problema de Ingeniería  en contextos cercanos, que le permita recordar y fortalecer sus aprendizajes previos, para establecer conexiones  y relacionar  nuevos conceptos; reflexionando sobre su aprendizaje como persona y profesional al trabajar con otros en la consecución del logro, despertando su interés y  mejorando su disposición hacia el aprendizaje, encontrado sentido a su estadía en la Universidad”, dijo.

Esta apuesta de aprendizaje transformador incide en el desarrollo de clases centradas en el aprendizaje activo, para que los estudiantes, desde su primer semestre, adopte una postura reflexiva sobre su rol académico.

“El principal impacto es la retención, el mejoramiento en el rendimiento y eficacia educativa y un saber-hacer para perfilarse como constructores y transformadores para un mundo mejor. Los estudiantes que llegan a la Facultad de Ingeniería de la UAO, se caracterizan por ser jóvenes en alto riesgo de deserción en su intento de integrarse a la vida universitaria”, manifestó la profesora Arce.

Sobre el proyecto

La estrategia se basa en integrar los Retos Creativos Colaborativos (RCC) con el semillero de investigación “Solución Creativa de Problemas”, para buscar   fomentar la indagación y potenciar las habilidades requeridas tanto en la formación de pregrado como en el campo profesional. 

La metodología se compone de: Fase I: Desarrollo y socialización del RCC en el aula de clase, Fase II: Vinculación de los estudiantes al Semillero, Fase III: Socialización del RCC en eventos académicos. Como resultado, se logra que los estudiantes desde los primeros semestres, identifiquen problemas del entorno real y propongan soluciones creativas, también permite fortalecer sus aprendizajes previos, con el fin de recordar y relacionar los nuevos conceptos para la solución de problemas.

La estrategia, permite que los jóvenes sean conscientes de lo que hacen, identificando aciertos y dificultades en cada situación de estudio y reflexionando sobre su proceso de aprendizaje. De igual manera, desde el inicio de su formación académica, empiezan a conocer las demandas y exigencias de los eventos académicos, además comienzan a perfilar sus intereses en el programa académico y en el campo de la investigación.

“Esta propuesta es relevante en tanto, propone una pedagogía centrada en el estudiante, es consecuente con las apuestas institucionales declaradas en el PEI y política curricular, favorece, incentiva y materializa la innovación, impulsa el saber – hacer y la solución creativa de problemas sociales, e integra lo curricular con lo extracurricular y contribuye a que el proceso de   adaptación de los estudiantes  a la nueva vida universitaria   sea lo más fácil y exitosa posible”, expresó la docente.

En el semillero solución creativa de problemas se motiva a los estudiantes para   mejorar sus proyectos, con el fin de sacar el máximo provecho de escenarios como: Laboratorios, Fab-Lab, sala de sistemas, asesoría de profesores. Todo lo anterior permite que los estudiantes desde inicio de su carrera puedan interactuar   con otros pares, asumiendo la responsabilidad de ser evaluados para avanzar en sus proyectos.

Arce señala que el proyecto ha permitido a los estudiantes aprender a trabajar colaborativamente, a comunicar las ideas que surgen en el aula de clase, e integrar el conocimiento a través del transcurso de los semestres, lo que les ha permitido mejorar sus propuestas.
 
“Esta experiencia ha servido para reflexionar sobre rol del docente y las transformaciones de la práctica educativa que este tipo de propuestas demandan, de igual manera ha permitido  trabajar desde el Departamento de Innovación en Ingeniería, en  dirección de diseñar, planificar  y evaluar actividades y recursos curriculares, pedagógicos y didácticos, que permitan desarrollar nuevas  experiencias de aprendizaje significativas en beneficios de los estudiantes de la Facultad”, manifestó la docente.

Los estudiantes 

Yuliana Andrea Yanten, y Juan Sebastián Ruano estudiantes de tercer semestre de Ingeniería Biomédica, ingresaron desde inicio de su carrera al semillero ‘solución creativa de problemas’, han trabajado en la creación de un dispositivo biomédico para prevenir la lumbalgia en una empresa de transportes. “Hemos aprendido a manejar el público en los distintos eventos de semilleros en los que hemos participado”, expresó Yuliana.
 
Para ellos, el semillero ha sido una oportunidad para conocer y explorar acerca de su carrera. “Aprendimos sobre la importancia de la investigación, del adecuado uso de la información, y sobre cómo poder interactuar y enfatizar en las personas que tienen una necesidad potencial”, dijo Juan Sebastián.

A partir de esta experiencia en el semillero, el estudiante José David Torres, de tercer semestre del programa de Ingeniería Mecatrónica ha tenido la oportunidad de participar en eventos de investigación, el más reciente el ‘Encuentro Internacional de Educación en Ingeniería ACOFI 2019’, con un proyecto que busca prevenir las enfermedades asociadas a la espalda.
 
“El semillero me abrió las puertas hacia la electrónica porque es un dispositivo automatizado, el cual suple la necesidad que una persona esté recordando a otra cómo debe asumir una postura, y por tanto tuve que aprender las bases de la Ing. Electrónica, como el manejo de Arduino, y el manejo de voltajes con la resistencia de sensores”, expresó José David.
 
Sebastián Orozco, estudiante de ingeniería mecatrónica de cuarto semestre, destaca la manera de aprender a investigar. “Lo principal que resalto de este proceso con el semillero es aprender a utilizar diferentes equipos, el poderme relacionar más con los laboratorios de la Universidad y las herramientas que nos proveen”, señaló el estudiante.

Orozco añade que los insumos aprendidos en el semillero los ha utilizado para el desarrollo de su proyecto basado en un sistema de automatización de mallas de seguridad aplicado en los balcones del edificio donde vive. “Me gustaría exponer mi proyecto a nivel internacional y poderlo aplicar también a la vida real, y sobre todo proteger mascotas que es el objetivo principal de la investigación”, expresó.

El premio 

Los profesores tendrán la oportunidad de compartir su trabajo junto a otras 40 propuestas que fueron seleccionadas en cinco categorías distintas y presentarán su propuesta en el Encuentro Latinoamericano de Innovación en Educación Superior que se realizará en Bogotá los días 10 y 11 de octubre de 2019, en la Universidad del Rosario.

Durante el Encuentro, se realizará la votación en línea que definirá el ganador por categoría. El docente Autónomo, Germán Gallego, también hará parte del jurado.
 

Informes:
Facultad de Ingeniería
Sandra Arce Guerrero, ext. 11314
Correo: sarce@uao.edu.coPrograma de Articulación con la Educación Media
Carlos Vega, ext. 11339.